Consiste en el empleo de los alimentos de manera tanto preventiva como terapéutica. Su principio viene definido como en el resto de las técnicas y terapias de la MTC por las leyes del universo y el mantenimiento o recuperación del equilibrio del organismo.
Desde la perspectiva de la dietética china, cada alimento aporta una energía concreta en función de su naturaleza, sabor, color, dirección de acción y preferencia por los meridianos energéticos. Es decir, no se basa en la composición química de los alimentos.
En la antigua china el papel fundamental de los dietistas era el de preservar la salud y asegurar la longevidad de los emperadores elaborando dietas preventivas y basadas en la observación de la naturaleza para la adecuada combinación de alimentos.